miércoles, junio 07, 2006

Travesuras de la niña mala


Hoy tenía pensado escribir sobre un libro que me encantó, que leí hace tiempo y que me hace sentir más sensible de lo que ya habitualmente soy: Donde el corazón te lleve (Susana Tamaro). Me he puesto a recordarlo y mi pequeño corazoncito hoy ha dicho que no quiere pasarlo mal, así que he decidido dejarlo para otro día en que esté más positiva y con más fuerzas para seguir adelante. Por eso, voy a contaros lo que me ha parecido el último libro que he leído y que acabé ayer mismo: Travesuras de la niña mala, de Vargas Llosa.


Autor: Mario Vargas Llosa


“Travesuras de la niña mala” cuenta la historia de Ricardo Somocurcio. Todo comienza en el verano de 1950, en el barrio de Miraflores (Lima). Ricardo vive con su tía Alberta y se enamora de Lily, una chilenita a la que rodea siempre un halo de misterio. Tras un incidente inesperado la chica desaparece y no vuelve a saber más de ella.

El tiempo pasa y Ricardo ve cumplido su sueño: vivir en París. Para ganarse la vida se convierte en traductor para la UNESCO y poco a poco se va haciendo un sitio en el mundillo. Por una serie de casualidades de la vida Ricardo y Lily se vuelven a encontrar después de tantos años. Ahora se llama Arlette y rápidamente Ricardito (como lo llama ella durante la novela) se da cuenta de que sigue igual de enamorado de ella que cuando la conoció cuando sólo eran unos críos.

A partir de ese momento la vida de Ricardo estará marcada por las apariciones y desapariciones de la niña mala, por el amor que siente por ella, por la traición, por los celos, por el interés…



Esta novela me ha marcado bastante. Es la primera de Vargas Llosa que leo y la escogí la semana pasada porque había algo en su portada que me llamó (cosa que me suele pasar frecuentemente).

No he querido dejar pasar el tiempo para que no se me olvide este sabor agridulce que te deja en el corazón. Todos hemos tenido o tendremos alguna vez a nuestro lado alguien como “la niña mala” de esta novela. A pesar de que nos hace daño, de que sabemos que no se puede seguir así, de que la cabeza te diga que te alejes… hay algo que te hace querer más.

Es increíble cómo es el amor que hace que valores más 10 minutos, 2 días, 3 meses o 1 año de felicidad que toda una vida de desplantes, de ahora te quiero pero mañana no, de traición…

Mientras leía el libro pensaba que nadie es como el protagonista. Todos tenemos nuestro corazoncito y que te hagan daño una vez vale, dos también, pero ya a la tercera te mosqueas y cuando el tema pasa a ser una cosa constante te alejas de la fuente de dolor. Pero cuando lo acabé, ayer a media mañana, pensé que todos hemos sido o seremos alguna vez como Ricardito, como el pichiruchi de la niña mala, que a pesar del daño y el dolor que le produce estar enamorado de alguien como ella consigue ser feliz, consigue perdonarla una y otra vez… Supongo que cuando estás enamorado todo vale.

Aunque la historia de Ricardo y la chilenita sea la parte central de la historia también aparecen personajes que cobran una especial relevancia: Paúl, amigo de Ricardo en París; Juan Barreto, retratista de caballos y que vive en Londres; Salomón Toledano, un traductor de la UNESCO, los Gravoski, una pequeña familia que se traslada a la casa de enfrente de Ricardo; el señor Charnés, Fukuda, el tío Ataulfo, Arquímedes… Toda una serie curiosos personajes que completan y acompañan la vida de Ricardo.

Es una novela bonita, que te hace reflexionar sobre lo que has sentido o no has sentido en tu vida, sobre los principios y valores de cada uno, sobre la vida y el amor, sobre el deseo y la traición…

Mi nota: 7´5

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"El Padrino" un día y "Travesuras de la niña mala" el siguiente... sin lugar a dudas un blog de contrastes

Anónimo dijo...

Je, je... Ya sabes, cuando se trata de libros...

Cuánto más variado mejor ¿no?